Descripción
En La mitad y otro tanto Fadrique el protagonista acaba de aceptar una baja incentivada para abandonar su empresa, y ahora se encuentra en la calle pero con los bolsillos llenos, pensando si quedarse en el archipiélago lejano adonde llegó para tomar posesión de su cargo, o si por el contrario volverse a su pueblo de origen, en el norte continental del país; cuando se encuentra con Bárbara, una clienta de la empresa, que le reconoce y le propone un negocio, sabedora de que él se tendrá que determinar a emprender por su cuenta.
Le cuenta Bárbara que junto con su hermano tenían los dos una pequeña empresa de transporte aéreo, pero que una mala partida (asunto de drogas, por las trazas) les ha dejado sin la avioneta y con el hermano de ella en la cárcel.
Finalmente se asocian, él pone el dinero para recuperar la avioneta y reemprenden el negocio, apasionadas aventuras aéreas por el continente africano cercano. A todo esto, uno y otra se han comprometido para casarse. Liberan al hermano de su prisión africana por medio de sobornos, emprenden arriesgados viajes (contrabando, tráfico de armas, transportes de mercancías prohibidas), y a una de ésas, resulta que los dos hermanos (el protagonista se ha quedado en casa esta vez) no vuelven de una arriesgada misión en el desierto, se sospecha que hayan podido caer en manos de una peligrosa banda de traficantes de armas.
Cansado de esperar y perdida la esperanza, él se vuelve a su pueblo, después de haber vendido sus propiedades, allí consigue un contrato temporal en una empresa del ramo, conoce a otra, acaba por decidirse a casarse, pero…
Todo esto en buena prosa escrito, en estilo fluido y elegante, lleno de aventuras y peripecias, andanzas y anécdotas, de episodios románticos, así como personajes de lo más variado, todo ello ameno y fácil de leer, apto para cualquier tipo de público. Lo mismo le gustará al catedrático de literatura, que a su criada.
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